Circulación oceánica


Las corrientes oceánicas son mezclas de diferentes movimientos del agua, variando en tamaño, velocidad y tiempo. Son producidas por el viento, la densidad del agua y las mareas. Hay dos tipos: superficiales y profundas.

Fte.: NOAA

Las corrientes superficiales están producidas por la fuerza que el viento ejerce sobre la superficie oceánica. También se ven afectadas por las características del suelo y la costa, y el efecto Coriolis (rotación terrestre). A causa de Coriolis, las corrientes rotan en sentido horario (este) en el Hemisferio Norte y en sentido antihorario (oeste) en el Hemisferio Sur. Esto es observable a escalas temporales grandes. Estas corrientes transfieren el calor de las regiones más cálidas, como los trópicos, a las zonas frías, como las regiones polares.

Uno de los efectos más importantes de las corrientes superficiales es el afloramiento (upwelling). El afloramiento es un proceso mediante el cual las aguas frías y profundas suben a la superficie. Esto es debido a los movimientos verticales de masas de aguas. Se da normalmente en el borde occidental del océano. Estas aguas que afloran son ricas en nutrientes y sirven de alimento a muchos peces y aves.

Fte.: NOAA

Las corrientes profundas son consecuencia de diferencias de densidad. Reciben el nombre de corrientes termohalinas (Thermo- calor, halino- referido a salinidad) dado que las diferencias de  temperatura y salinidad implican diferencias en densidad. Están fuertemente condicionadas por la topografía del fondo oceánico, sobre todo por la posición de las dorsales y del talud continental. Siguen los bordes occidentales de los océanos, por efecto de Coriolis. Las aguas profundas son mucho más lentas que las superciales (2-40 cm/s en profundas vs. 250 cm/s).

En las regiones frías, tales como Atlántico Norte, el agua pierde el calor y se vuelve fría y densa. Cuando se congela, la sal se queda en las aguas circundantes, que al ser ahora más densas, se hunden. Es entonces cuando las aguas cálidas superficiales ocupan su lugar. Se da, así, un sistema de circulación de aguas superficiales y profundas conocida como conveyor belt. Este sistema juega un papel importante en el clima global terrestre así como en los nutrientes del océano y el ciclo del carbono.

Además, presentan una influciencia biológica importante dado que condiciona las redes tróficas y la reproducción de los organismos marinos y los ecosistemas que habitan. Muchos organismos sésiles o con movilidad reducida dependen de las corrientes para alimentarse y reproducirse. También tiene repercusión en los patrones migratorios, ya que hay especies que se mueven en aguas con temperaturas dentro de un rango establecido.

Fte.: Nick Bernhard

Determinar tales parámetros no es tarea fácil, dado que requiere de un análisis matemático completo de la circulación tridimensional oceánica. Sin embargo, Walfrid Ekman encontró la solución al problema. Ekman introdujo, por primera vez, las fuerzas de fricción resultado de esfuerzos cortantes verticales  (fuerzas paralelas al movimiento).

El siguiente vídeo resume brevemente la información anteriormente explicada.


¡Un saludo y nos vemos en la próxima entrada!

Eva Pavo.



BIBLIOGRAFÍA
  • A. Miguel González, Carlos, and Ángel Costa Pérez-Herrero. Ciencias De La Tierra Y Medioambientales, 2. León, España, Everest, 2009,. 
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